A mediados del siglo XVIII ya había a Catalunya una importante producción manufacturera de indianes (tejidos de algodón estampados). Este proceso de proto-industrialitzación, vería estroncat a inicios del siglo XIX debido al estallido de la Guerra del Francés. Así, el desarrollo de la industria textil catalana tuvo que esperar hasta los años treinta y tuvo que hacer frente a dos limitaciones bastante importantes que condicionaron su evolución: las carencias energéticas y la febles del mercado español.
Hoy visitamos una antigua fabrica textil, donde por la noche a manos del maestro "Paché" nos dio unas magistrales clases de pintar con luz.